En la mañana de AM 1530 estuvo la Psicóloga Vanina Lovera, para dialogar sobre las emociones que surgen en las personas, en estas fiestas, tras haber vivido distintas realidades durante el año.
“Los fines de año siempre traen un movimiento emocional intenso en muchos aspectos”, expresó Vanina Lovera (Lic. En Psicología MP 4855 y Terapeuta gestáltica), quien trabaja con adultos y adolescentes, además es miembro del colectivo “Mujeres por un parto respetado Córdoba”.
“Parece que la pandemia nos ha ocultado que la gente se muere de otras cosas, que también hay otras cosas que tenemos que resolver y ocuparnos como sociedades, estado e individuos”, manifestó la Psicóloga Gestáltica con postgrado en eneagrama y psicodrama.
Ante las situaciones difíciles que una persona puede atravesar en sus relaciones con los demás observó: “hay que reconocer que el enojo siempre es mío, y no es con el otro. Entonces no me puede descargar el enojo con el otro porque es algo que le pasa a uno mismo. Puedo poner en conocimiento al otro sobre mi enojo, pero el otro no es el culpable ni merece mi irritabilidad, violencia ni agresividad”.
Sobre cómo se vive la Navidad e ilusión de Papa Noel en los niños dijo: “es una decisión de cada familia. En los niños la línea entre la fantasía y la realidad, es muy endeble. Lo más importante es que después como adultos podamos acompañar en la desilusión y empezar a hacer participar de que ahora lo que descubrió es parte del mundo de los adultos”.
En este encuentro de diálogo con AM 1530, también trató sobre la generación que socialmente se suele poner en foco, y reveló: “los adolescentes no son el problema. Son los que muestran lo que la sociedad les ofrece. Qué le damos los padres y comunidad, qué contención, acompañamiento, qué idea de futuro e idea de esfuerzo le transmitimos”.
“Ellos no son el problema, son el síntoma de que somos una sociedad enferma. Los adultos subestimamos sus opiniones, no nos estamos conformando como adultos capaces de acompañar saludablemente tanto a niños como adolescentes”.
Con respecto a la cotidianeidad actual, dijo: “vivimos en una desconexión constante, entonces si voy desconectado por la calle manejando es muy posible que pueda tener un accidente. Si a eso le sumo que voy en exceso de velocidad y/o alcoholizado las chances se multiplican”.
En estos días, muchas familias están atravesando duelos por víctimas de la pandemia, por pérdidas de seres queridos con distintas causas, por lo cual en estas tradicionales fechas se siente la ausencia. Se siente cuando falta una silla en la familia: “hay que acompañar y entender que hay procesos normales. Si estoy atravesando un duelo, hay que permitirse conocer qué siento y qué tengo ganas de hacer”.
“El mensaje que me gustaría dejarles para las fiestas es que cada uno pueda respetar su deseo y su capacidad de lo que puede en este momento y respetar el de los otros”, comentó.
“Elegir lo que deseo y disfruto”, finalizó el encuentro en estudio de AM 1530.