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La música con volumen alto se registró en una noche de boliche que se llevó a cabo en el predio de Sociedad Rural de Morteros.
“Ya habíamos recibido quejas antes de que comience el evento, cuando estaba la prueba de sonido. Chequeamos el nivel y estaba dentro de los rangos permitidos”, explicó Walter Racca desde Inspectoría Municipal.
El director de Inspectoría advirtió que, igualmente, “es difícil que un evento al aire libre no repercuta en los vecinos”. Racca señaló que “hay un rango entre 70 y 90 decibeles”.
Tras el evento, ya tradicional todos los años, el reclamo de los vecinos provino de diversos sectores de la ciudad.
Foto ilustrativa