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Se llama Agustín Pelossi, es peluquero y tuvo que pelarse porque Argentina logró el título mundial. Llevaron la máquina a la Pachamama y varias fueron las cabezas peladas.
“A mis amigos les íbamos a cortar el pelo su salíamos campeones: al principio nadie quería, después todos se pelaron”, asegura Agustín.
Entre 20 y 30 peladas fue el saldo: “fue hermoso todo”, aseguró este lunes en diálogo con AM 1530.
“Sabía que algunos se iban a pelar, pero no tantos así”, apunta entre risas el peluquero, que al ver el panorama de cómo se gestaba festejo en el centro, fue a buscar la máquina a su casa.
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